El sueño de Eva
Todo parte de mis recuerdos de infancia en mi pueblo natal Vinaceite-Teruel. En contraste con la aridez del paisaje crece una extraordinaria flor, la flor del azafrán.
De aquellas vivencias en las tardes de otoño, saliendo de la escuela, cuando veíamos a nuestros mayores sentados en torno a largas mesas colmadas de flores, hasta la recuperación del cultivo de esta flor por quien conoce y ama la tierra como nadie, Antonio mi padre, surge este proyecto vital que me transporta a aquellos años entrañables. De niña veía cómo se desechaba en grandes cantidades la flor, una vez hecha la extracción de la preciada especia. Conociendo los beneficios y propiedades del azafrán, intuía que la flor debía contener también esas magníficas propiedades. Esa curiosidad mantenida durante años, me llevó a iniciar esta andadura junto con la Universidad San Pablo CEU. La investigación reveló muchas propiedades beneficiosas para la piel como potente antioxidante, debido a la presencia de numerosos principios activos presentes en la flor del azafrán, alguno incluso en mayor concentración, que la propia parte recolectada como especia. La planta sintetiza estos compuestos químicos para atraer a animales polinizadores, hacer frente a las condiciones medio ambientales desfavorables y combatir radicales libres. Algunos de ellos son responsables de su extraordinario color precioso, que recuerda al diamante púrpura. Nuestra patente la hace excepcional y valiosa en propiedades para nuestra piel y para mantener el cultivo y la sostenibilidad del ecosistema. La naturaleza es la madre de nuestra ciencia.
Orígenes
La flor del azafrán es una planta perenne (Crocus Sativus) pertenece a la familia Iridaceae. Esta planta es originaria de Asia Menor y la cuenca del Mediterráneo Oriental y su cultivo se remonta al siglo VII a.C. La planta se compone de un cormo y delgadas hojas de color verde oscuro. Su flor hermafrodita de color púrpura, lila a malva, tiene 6 tépalos:(pétalos y sépalos no diferenciados) . La flor, que es la parte de interés que hemos valorado, aparece en otoño y es efímera: de hecho, solo vive 48 horas antes de marchitarse. La enigmática belleza de sus flores púrpuras, estambres amarillos y estigmas rojos, únicamente es superada por las excepcionales propiedades que nuestra investigación revela que contienen sus principios activos. Sus estigmas conforman la especia más cara y extraordinaria del mundo. Es el diamante entre las plantas por las numerosas y excepcionales propiedades que contiene. Hacemos la recolección manual, una a una, empezando antes de la salida del sol, para evitar la oxidación de la flor. Tras la recolección separamos los tépalos de los estigmas.
El azafrán es un lujo que nos regala la naturaleza, conocido como el “oro rojo”. Sus extraordinarias propiedades ahora también para nuestra piel, dan como resultado: ÔRUM, Bio·Serúm. La combinación entre botánica, ciencia, sabiduría y respeto por la tradición de este cultivo milenario , nos da este valioso Bio Sérum la mejor joya sobre tu piel, como el diamante púrpura.
Nuestros valores
NATURAL
Nuestros productos provienen de cultivos ecológicos cultivados y extraídos directamente de nuestra tierra con los ingredientes activos más eficientes
VEGANO
Nivel de autoexigencia máxima Superamos los estándares permitidos ecocertificados. Nuestras fórmulas nos avalan
UNIVERSAL
Pensado para todo tipo de personas, edades, razas y pieles. Reivindicamos la sensualidad individual de cada persona, porque todo es cuestión de piel
SOSTENIBLE
Haciendo honor a las tres erres: reutilizar, reducir y reciclar son las características que determinan nuestra marca